Sybil

AÑO: 1976

PAÍS: USA

DIRECTOR: Daniel Petrie

GUIÓN: Stewart Stern  basado en el libro de Flora Rheta Schreiber
REPARTO: Sally Field, Joanne Woodward

GÉNERO: Drama

PUNTUACIÓN:

Muy Buena

Por: César Quevedo

"Sybil" originalmente fue transmitida por televisión como una miniserie, posteriormente se juntaron las partes que conformaban la miniserie para presentarse como un telefilm, protagonizado por la ganadora de dos premios Oscar, Sally Field (“Norma Rae” en 1979 y “Places in the Heart” en 1984), relata la vida de una tímida joven llamada Sybil Dorsett. Basado en el libro del mismo nombre que cuenta la vida de Sybil, el cual también se basa en la verdadera historia de Shirley Ardell Mason, quien murió en 1998 a la edad de 75 años, fue una maestra de arte que padeció del trastorno disociativo de identidad (conocido también como “trastorno de personalidad múltiple”), un tema que aunque se ha abordado en muchas otras películas, ninguna tan profunda como esta, que incluso es usada en muchas universidades para introducir a los estudiantes en el estudio de ese trastorno. El caso de Mason es considerado como el primer caso verídico registrado acerca de este trastorno, aunque hasta la fecha, sigue siendo controvertido.

Sybil, se desempeñaba como una maestra substituta de arte de unos pequeños estudiantes, cuando es atormentada con algunas visiones y recuerdos de su niñez. Tras padecer algunos episodios de “pérdida de memoria” que iban desde unos minutos, hasta varios días, decide buscar la ayuda de su psiquiatra, la doctora Cornelia Wilbur. Con la ayuda de la psiquiatra, Sybil descubre que tiene 16 personalidades diferentes.

Sally Field interpreta el papel principal, lo hace de una manera extraordinaria, en momentos escalofriante, tan bien realizado que logra transmitirnos la dolorosa situación de Sybil, mientras  Joanne Woodward en el papel de la doctora Wilbur fue quien nos proporciona el lado tranquilo y afectuoso, tratando de tomar el papel de psiquiatra/ buena madre para  intentar ayudarle en su recuperación. Con una escena final que está envuelta  en una esencia purificadora y emotiva.

Una historia muy bien contada, de momento estremecedora, incluso con algunos toques de suspenso pero al mismo tiempo conmovedora, que nos acerca a la terrible situación que padecen las personas con este trastorno, sumamente entretenida, a pesar de que dura poco más de 3 horas, la verdad es que está magníficamente actuada y dirigida que el tiempo se va volando.

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